¿Hasta luego?

Te vas. No puedo hacer otra cosa que decirte adiós con la mano mientras una lágrima recorre mi mejilla. A estas alturas ya debería de estar acostumbrado a dicha situación pero por más que se repite no consigo encajarla bien.

Ahora vuelta a empezar. Los meses de tristeza, tan largos e incomodos, en los que no me apetecerá estar con otra persona que no seas tú. En los que me apetecerá estar cada instante del día contigo. En los que pensaré el por qué de todo.

Sólo espero que al menos nos quede la amistad, que creo que sí. Esas miradas cómplices, las risas sin sentido, los escándalos públicos... jajaja. Somos muy parecidos en el fondo, tal vez por eso disfruto tanto cuando estoy contigo. Espero poder seguir gozando de estos momentos que me alegran la vida y sin los cuales sería tan monotona.

Gracias por todo.

0 comentarios: