Expedición a la Expo

El sábado pasado, deambulabamos por la calle a las 7 am, cuando un componente del grupo propuso (muy acertadamente, por cierto) un viaje rutinario hacia las instalaciones de la Expo. Claramente todos aceptamos de buen grado y pusimos rumbo a dicho recinto.

Recorrido realizado

De camino a nuestro destino hicimos acoplo de provisiones en una tienda cuyo dueño oriental intentó estafarnos (sin conseguirlo, claro). A grandes rasgos la muestra parecía entretenida en lo que pudimos alcanzar a ver desde fuera de las vayas. Particularmente me gustó el pabellón ugandés, cuya fachada formaba una especie de olas con el viento.



Ni que decir tiene que había muchas cosas a medias. Cuadros eléctricos tirados en las aceras, empalmes al aire libre a espensas de hacer la zanja y soterrar los tubos, maquinaria de construcción por el recinto... Si vais a ir a verla, os aconsejo esperaros un poco para darles tiempo a terminar con todos los pequeños detalles.


Hice un reportaje fotográfico, de mala ca
lidad, el cual paso a mostraros.

Puente del Tercer Milenio


Pabellón Puente


Torre del agua


Pabellón de Aragón

Noticia cómica de la semana

Estaba viendo ayer el telediario cuando una noticia atrajo mi atención por completo. Resulta que en el condado de North Yorkshire, una pareja de granjeros se percató de que uno de sus cerdos no era capaz de andar por el barro como el resto de sus congeneres.

Cinders ("cenizas" en inglés) evita retozarse, o tan si quiera acercarse, a lo que para el resto de su especie es un placer mayúsculo debido a que padece misofobia (miedo a la suciedad). Resulta irónico que el animal al que todo el mundo asocia a la suciedad tenga miedo a la misma...


Sus dueños, lejos de resignarse y mantener al animal apartado del resto, dieron con la solución. Le pusieron las botas de un peluche de su hija pequeña, con lo que la cerda no se mancha las patas y campa libremente por barro, charcos y lo que haga falta. Supongo que conforme crezca tendrán que ir improvisando nuevas soluciones, o por lo menos comprarle unas botas mas grandes...


Aquí os dejo un video del susodicho, cuando menos gracioso.





Aireando la ropa interior

Estaba el otro día en la sala de estudio de la EUITIZ (lugar de sabiduría popular), cuando me llamó algo la atención. Eran una chica. Vestía con una sudadera amarilla, vaqueros y unas deportivas doradas, que particularmete me parecieron bastante feas. Nada de eso le haría especial a simple vista (al menos para mí). Lo que hizo que clavase mis ojos pseudopsicóticos en ella fue la rabadilla, también llamada vulgarmente "hucha", que mostraba la pueril muchacha.

Vale que yo puede mostrar los calzoncillos o incluso se me haya podido ver dicha parte del cuerpo en alguna ocasión, pero desde luego no es esa mi intención. Yo por gusto me compro los vaqueros "de culo caido" y prácticamente la inmensa mayoría de ellos llevan botones en lugar de, la tan añorada por mi, cremallera (es un tema que me gustaría comentar más ampliamente en otra ocasión). Esto hace que si quiero usar cinturon para que no se me caiga, cada vez que voy al baño tengo que desabrocharmelo (el cinturón). Teniendo en cuenta que un sábado cualquiera puede haber una media de 5-6 visitas al WC, hace que reniegue de ponermelo y muestre mi hermoso culo a diestro y siniestro.

Todo esto lo digo desde el más profundo respeto hacía la muchacha y animando a todo el género femenino de este país a seguir su ejemplo. Chicas, ha llegado la hora de que mostreis vuestras hermosas rabadillas!



Nota: dejo una foto que tomé de la susodicha para que contempleís el motivo de mi asombro
(las bragas no me gustan). Su cara está distorsionada para evitar que pueda sentirse ofendida.




Para gustos, colores...

Pues sí, señores. No se me ocurre otra forma de describir lo que acabo de leer. Un hombre llamado Edward Smith afirma haber tenido relaciones sexuales con al menos mil (y aquí es donde viene lo extraordinario de la noticia) automóviles...

Y yo que pensaba que la principal duda de los hombres a la hora de elegir pareja era el color del pelo. Pues no, Edward parece que tiene otros rasgos a destacar de sus acompañantes, como pueden ser la tapicería o sus faros.

Mi pregunta es: ¿Estas relaciones son recíprocas? Me explico, se supone que este personaje aprueba la relación, pero ¿y el coche? ¿quién le ha preguntado al coche que le parece que éste personaje de rienda suelta a su onanismo mientras le acaricia?

Hay momentos en medio de ninguna parte en los que veo un coche y siento que necesita amor. Entonces espero hasta que está oscuro y me acerco para darles besos

Bajo mi humilde opinión, este hombre ha llegado a tal extremo producto de las constantes humillaciones a las que le han sometido las mujeres (¡sí, siempre es vuestra la culpa!), lo que no quita que pueda seguir ejerciendo dicho acto con sus coches siempre que lo haga en la intimidad.



PD: Lo que más me ha llamado la atención y a la vez ha hecho que suelte una carcajada ha sido su siguiente afirmación:

Cuenta que no le atraen ni las mujeres ni los hombres y que ha practicado sexo con unos 1.000 coches, aunque su experiencia más intensa fue con un helicóptero.



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